Cuentan las viejas leyendas
Que una vez hubo un lugar
Donde se podía soñar.

Donde el viento del pasado
Al molino no hace andar
Ni hace callar al juglar.

Cantaron los trovadores
Que el obispo del lugar
Al marqués hizo llamar.

¡Se rebelan los villanos!
Les ha dado por pensar
Y empiezan a murmurar.

Mantener el orden de nuestra nación
No es una cuestión baladí
Sueltan los perros de la inquisición
¡Y ahora vienen a por mí!

Porque yo no rezo a ningún Dios
Ni tampoco sirvo a ningún rey
Porque no podrán callar mi voz
Estoy fuera de la ley.

Ya saben vuestras Mercedes
Lo que no hace tanto tiempo
En esta tierra aconteció.

Bienvenidos al Medievo
No se salgan del camino
Y vayan ustedes con Dios.

Mantener el orden de nuestra nación
No es una cuestión baladí
Sueltan los perros de la inquisición
¡Y ahora vienen a por mí!

Porque yo no rezo a ningún Dios
Ni tampoco sirvo a ningún rey
Porque no podrán callar mi voz
Estoy fuera de la ley.

Porque yo no rezo a ningún Dios
Ni tampoco sirvo a ningún rey
Porque no podrán callar mi voz
Estoy fuera de la ley.

Caballeros, ¡Caballeros!
El Rey no ha muerto
¡El Rey ha vuelto! (¡Ehh!).

Porque yo no rezo a ningún Dios
Ni tampoco sirvo a ningún rey
Porque no podrán callar mi voz
Estoy fuera de la ley.

Porque yo no rezo a ningún Dios
Ni tampoco sirvo a ningún rey
Porque no podrán callar mi voz
Estoy fuera de la ley.

¡Oh! ¡Ohhh!
Estoy fuera de la ley
¡Cabrones!