Ya viví, ya recibí mi cruel castigo,
ya pagué el grave error de estar contigo,
por cada beso tuyo
un sufrimiento recibí sin merecerlo,
no quise hacerle caso al corazón,
que fue el primero en comprenderlo.
Ya sentí, ya comprendí que no me quieres
que seré juguete vil de tus placeres
y en nombre del perdón y del olvido
te pido que te vayas para siempre,
que no regreses más,
que nunca nunca más, te encuentre.
Ya sentí, ya comprendí que no me quieres
que seré juguete vil de tus placeres
y en nombre del perdón y del olvido
te pido que te vayas para siempre,
que no regreses más,
que nunca nunca más, te encuentre.