A veces te sientes bien, a veces tiemblas, se
recoge lo que se siembras. ¿Qué es
lo que todo buscamos? Lo que nos une como a cinco
dedos en la mano. recoge lo que se siembras.
¿Qué es lo que todo buscamos? Lo que
nos une como a cinco dedos en la mano.

No sabes que en mis 40 soy el principal, aunque
no suene digital; los rapeos en mi cuarto son de
infarto. Parto, pego otra vez, muevo las fichas
del tablero de ajedrez. Nadar contracorriente es
muy desagrecido. No estoy ciego, es que nadie ve
cuando yo miro. Cuando estaba en la clase, siempre
quise tirarme a la profesora, vosotros
mirabáis la hora, queriáis iros.
Suena la campana o es un reloj al lado de la cama.

No te enterarás ni a tiros de que el
tiempo es un vampiro; bebe de sangre fríad,
que se alimenta a la luz del día de
suspiros. ¿Diamantes, zafiros? Prefiero la
plata, da menos problemas, no quiero meter la
pata. Admiro a los caraduras que salen limpios de
buscar en la basura, impunes al mataratas. Se oyen
tantas tonterías que te dejan frío.
La gente es que es idiota, tío, no aguantan
la tentación de llamar la atención,
se convierten en esclavos. Vamos perros, moved el
rabo.

Soy sólo otro golfo con un boli en la
mano, pase lo que pase, intento ser real en cada
frase. Sueño con no tener dueño,
seguir soñando es mi sueño, sacar mi
alma de la casa de empeño. Porque me la
sudan tiempos pasados, enfados. Veo el camino, soy
un filipino iluminado, algunas veces me siento muy
nostálgico del costo. No me creo Dios, pero
escúchame como a un apostol. No hay
problemas, chulo, mi alma está en calma, mi
corazón bate las palmas, y eso que ya no me
los rulo.

No hay problema, soy felíz sin crema; ser
felíz, ese matíz. Soy un mueble de
madera sin barniz; antes era maestro, ahora soy
buen aprendiz. Ganar, perder, competir como Martin
Fiz. No ir de mártir, repetir, corregir
cada dezlíz, decir 'paz' no 'peace'. Me
meo, no hago pis, me meo en tí. Yo soy de
aquí, siempre lo hago así. Devasto,
es la emoción. ¿Quieres ser el
primero? Pues vamos, campeón, que estamos